La factura electrónica cobra fuerza en el mercado global. Su uso es obligatorio en más de 80% de los países de Europa y, de acuerdo con un informe de SERES, 100% de las naciones de esa región ya la utilizan, mientras que en la región Asia – Pacífico (APAC) está aumentando su implementación.

En América Latina y el Caribe, el sistema de facturación electrónica se ha consolidado en Uruguay, Argentina, Chile, Perú, Ecuador, Colombia, Brasil, Costa Rica, Guatemala y México, mientras que El Salvador, Panamá, Paraguay y República Dominicana están en proceso de adoptarla.

En Panamá, la Dirección General de Ingresos (DGI) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) había establecido el 31 de julio de este año como la fecha tope para que las entidades públicas establecieran la factura electrónica como único documento válido para gestionar compras de bienes y servicios por parte del Estado. Ahora extendió el plazo hasta el 31 de octubre.

La facturación electrónica ofrece importantes beneficios al sector logístico y comercio internacional. Su principal ventaja es la automatización de todo el proceso, ya que una vez generada la factura por el PAC (Proveedor Autorizado Calificado) se simplifica su emisión, lo que ahorra tiempo, además de que ya está avalada por la DGI.

Durante su implementación, la seguridad de los datos de los clientes es muy importante, explica Daniel Zambrano, director general de Pranical Technologies Latam, empresa con más de 20 años de experiencia en transformación digital. “A través de nuestras soluciones de integración recibimos y formateamos de manera segura los datos de los sistemas de facturación de los clientes y los entregamos a la plataforma de EBI (Electronic Business Intelligence), uno de los PAC aprobados por la Dirección General de Ingresos (DGI). Todos los datos están protegidos”.

Pranical y EBI PAC firmaron una alianza en abril de este año, para acompañar a las empresas en el proceso de integración de sus plataformas de facturación. Además del formateo de datos, la plataforma de integración de Pranical también permite a los clientes conocer el estatus del procesamiento de las facturas y ofrece capacidades complementarias para agregar las funcionalidades en caso de que los clientes requieran acciones específicas.

Zambrano señala otras ventajas de la facturación electrónica para la cadena logística, como la agilización de los trámites para el pago a proveedores y la optimización del flujo de información entre todos los actores de la cadena (empresas, proveedores, clientes, transportistas, aduanas, entre otros).

“La facturación electrónica ayuda a disminuir los fraudes, porque ofrece un sistema contable más eficiente; contribuye con el medio ambiente, ya que reduce los costos en papel; también elimina el papeleo porque no se requiere un almacenamiento físico y permite un mejor seguimiento en las transacciones”, indicó el director general de Pranical Technologies Latam.